A tan solo 12 km de la costa y a 15 km de la capital del Algarve (Faro), se encuentra Loulé, una ciudad interior ideal para realizar una excursión. Se dice que es pura esencia portuguesa, ya que no cuenta con tanto turismo como la zona costera y podrás sentir mejor el auténtico ambiente portugués y las costumbres locales. Sus dos símbolos más reconocibles son su castillo y el Mercado Municipal.

Aunque al pensar en el Algarve lo primero que se nos viene a la cabeza son sus playas paradisíacas y sus bonitas localidades costeras, esta región de Portugal también cuenta con pintorescas ciudades de interior que bien merece la pena una visita como son: Silves, Monchique, Loulé, Alcotium…

El litoral de Loulé es conocido como el “Triángulo de Oro”, ya que abarca la zona de mayor prestigio del Algarve, con un espacio que incluye los resorts de lujo Vale do Lobo, Quinta do Lago y Vilamoura. Catalogados como uno de los mejores destinos de vacaciones en Europa, cuenta con una gran cantidad de instalaciones de entretenimiento y ocio como son sus playas, sus lujosos hoteles, los mejores campos de golf, sus yates o el casino. 

Hemos pasado en esta región de Portugal las navidades de fin de año 2023-2024 y las temperaturas eran muy agradables, de 23º-25º al mediodía. El Algarve es una región turística principalmente durante el verano pero mantiene su encanto típico durante todo el año y la Navidad no es una excepción. Las tradiciones navideñas se sienten en todas partes con un buen programa de animación con luces en las calles principales, belenes, música navideña y una gran decoración temática que os mostraremos a lo largo del post de Loulé.

Castillo de Loulé

De origen árabe, el Castillo de Loulé es uno de los iconos de la ciudad. Fue reconstruido en el siglo XIII y contaba con un gran perímetro amurallado. En la actualidad se conserva 3 de sus torres almenadas y algunos restos de murallas. Fue declarado Monumento Nacional en 1924.

La fortaleza se encuentra en pleno centro de la ciudad y cuenta con un buen estado de conservación. Alberga en su interior el Museo Municipal de Arqueología, donde se exhibe una colección de fragmentos de la Edad de Bronce y de cerámica romana. Además, es posible ver las ruinas moras excavadas gracias al suelo de cristal.

Mercado Municipal

Junto con el castillo de Loulé, la ciudad es famosa por su Mercado Municipal. De inspiración árabe, llama la atención por fuera por sus originales y bonitas cúpulas rojas y brillantes. Obra del arquitecto Alfredo Costa Campos, se inauguró en 1908. Se trata del mayor mercado cubierto del sur de Portugal.

Seña de identidad de la ciudad, el Mercado Municipal cuenta con una gran cantidad de puestos de los más variados, donde encontrarás todo tipo de productos como pescados, carnes, frutas, verduras, artesanía local, etc.

Nosotros fuimos el sábado por la mañana que es cuando mayor bullicio y ambiente tiene el lugar. Además, el mismo sábado por la mañana se celebran dos mercados adicionales en la ciudad. Está el mercado de frutas y verduras, que se instala en las calles que rodean al Mercado Municipal cubierto y un mercadillo gitano en el borde del pueblo, por lo que todavía Loulé se encuentra más concurrido y lleno de vida ese día.

Frente al Mercado Municipal vimos una gran bola de Navidad a la que se podía entrar por dentro. Por la noche tiene que ser increíble verla iluminada.

Escultura de la fuente

Ubicado en la rotonda principal de Loulé, al lado del Mercado Municipal en la plaza de la República, se encuentra un bonito monumento diseñado por Luís Bekker. Consiste en un aro con 2 bailarines encima y un acordeonista sentado a un lado tocando. Una fuente lanza chorros de agua hacia el aro, pero al estar el lugar en sequía no la tenían funcionando. La obra mide 9 metros de altura y está realizada en bronce.

Ayuntamiento y Torre del Reloj

Al otro lado del Mercado Municipal se localiza el Ayuntamiento de Loulé (la Câmara Municipal) y la Torre del Reloj (Torre do Relógio).

Aldea de los Sueños

Durante el mes de diciembre y desde hace varios años ya, la «Aldea de los Sueños» anima la Navidad en la ciudad de Loulé con un conjunto de actividades que pretenden promover el comercio tradicional y el turismo y por otro lado, el espíritu navideño.

En la «Aldea de los Sueños» se pretende recrear la aldea de Papá Noel, con decoración temática, la zona de los duendes y elfos, la pista de hielo, una «mini» rueda gigante, muñecos de nieve, un carrusel de madera, hinchables, pinturas faciales, gastronomía alusiva a la festividad y un ambiente muy navideño.

Además de instalarse la «Aldea de los Sueños» en los alrededores y el Claustro del Convento del Espíritu Santo, en este año se han añadido nuevos espacios como: frente al castillo (imagen de arriba), la plaza D. Afonso III y el Largo de S. Francisco. A nosotros nos encanta visitar las ciudades en Navidad.

Convento del Espíritu Santo

El Convento del Espíritu Santo se encuentra al lado del ayuntamiento y la Torre del Reloj. Destaca el claustro de estilo neoclásico del siglo XVIII en cuyo interior se localiza la Galería de Arte Municipal. Un espacio con exposiciones temporales de arte contemporáneo. Como ya hemos comentando antes, alberga en diciembre la «Aldea de los Sueños«.

Iglesia Matriz de San Clemente

La Iglesia Matriz de San Clemente fue construida en el lugar en que se alzaba la antigua mezquita árabe. Destaca la torre campanario del templo con decoración barroca, procedente de la adaptación del que era antiguamente el minarete musulmán. De estilo gótico, la iglesia data del siglo XIII aunque cuenta con intervenciones arquitectónicas realizadas posteriormente. El campanario contrasta con el blanco inmaculado del resto de la iglesia.

Jardín de los Enamorados

Justo enfrente de la Iglesia Matriz de San Clemente, se localiza un pequeño parque conocido como jardim dos Amuados (jardín de los Enamorados) construido en la segunda mitad del siglo XIX sobre un cementerio. Cuenta con una fuente en el centro y un mirador en uno de sus extremos.

Desde el mirador del jardín de los Enamorados, nos llamó la atención al fondo el Santuario de Nuestra Señora de la Piedad. Nos gustó tanto la apariencia de la gigantesca cúpula, que decimos ir a visitarlo en coche después de ver Loulé, ya que se encuentra a las afueras de la ciudad y en lo alto de una colina.

Puerta de Faro

La puerta de Faro se encuentra en la torre de albarrã (del árabe al-barran), y era la antigua entrada sur de la ciudad  medieval. Se encuentra adosada a la Ermita de Nuestra Señora del Pilar.

Murallas de defensa

Se conservan algunos tramos, no muchos, de las murallas medievales defensivas de Loulé.

Caños Viejos

Bicas Velhas (Caños Viejos) es una fuente del siglo XIX con 4 caños que servía en el pasado para abastecer de agua al pueblo. Se encuentra bien conserva y el agua es potable.

Santuario de Nuestra Señora de la Piedad (Madre Soberana)

Para acabar la visita, cogimos el coche para ir a visitar el Santuario de Nuestra Señora de la Piedad, también conocido como el Santuario de la Madre Soberana. Se encuentra en lo alto de un cerro a las afueras de la ciudad y es uno de los santuarios marianos más importantes de Portugal y que en su celebración anual se reconoce como «la mayor manifestación religiosa al sur de Fátima«.

Hoy en día se encuentra aquí, junto a la capilla, la particular iglesia con moderna y gigantesca cúpula que puedes ver desde casi cualquier lugar de la ciudad.

De acuerdo con los registros existentes de la Orden de Santiago, la Capilla de Nuestra Señora de la Piedad fue construida en el año de 1553. La actual ermita, del siglo XVIII, se levanta en el lugar del edificio más antiguo. Su estructura arquitectónica es sencilla. La antiquísima devoción a la Madre Soberana tiene su punto álgido en el segundo domingo después de la Pascua, siendo sus andas llevadas en procesión.

La zona donde se encuentra el santuario, al encontrarse en una colina, es un magnífico mirador de la ciudad, de los campos de alrededor y del mar. Aquí dimos por concluida la visita a Loulé, una localidad con mucho encanto.

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