Oporto es la segunda ciudad más importante de Portugal, después de Lisboa. Se encuentra en el norte del país, en la ribera derecha del Duero en su desembocadura en el océano Atlántico. Dista de la frontera española con Galicia unos 140 km, que pueden recorrerse por autopista.

Desde muy antiguo hay una rivalidad entre Lisboa y Oporto. Dicen que esta ciudad tiene un cierto aire británico, desde que se asentaron aquí los comerciantes de vino ingleses. Su aire decadente, su belleza y sus callejuelas estrechas, han hecho que el centro histórico de Oporto haya sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1996.

Nuestro segundo día en Oporto, por la mañana comenzamos rodeando las muralha fernandina y dimos de bruces con la catedral (imagen de arriba). Luego vimos la fachada del Teatro Nacional São João. Atravesamos el emblemático puente de Luis I y bajamos a la avenida Nova de Gaia. Hay dos formas de bajar a la parte baja de la ciudad: el funicular «dos Guindais« o a pie.

En la orilla opuesta de la calle de la Ribeira, pudimos apreciar mejor las coloridas y decoradas fachadas que en un principio llamaron nuestra atención. Desde ahí atravesamos el puente por la parte de abajo y recorrimos el barrio de la Ribeira con sus preciosas y coloridas fachadas. En este pintoresco lugar nos encontramos con restaurantes con terrazas donde pudimos contemplar las bonitas vistas hacia el Duero y el puente Luis I.

Si por la mañana nuestra visita turística fue fascinante, la tarde puedo denominarla de magnífica. Empezamos subiendo al mirador de la Victoria donde pudimos deleitarnos con una panorámica de Oporto fantástica. Bajamos hacia la Iglesia de los Clérigos, después de visitar la iglesia tendréis que subir a la torre. Las vistas privilegiadas de la ciudad hacen olvidar los más de 200 escalones de la subida. De vuelta pasamos por la avenida de los Aliados y para terminar vimos por casualidad la bonita Capilla de las Almas, una pequeña iglesia decorada con azulejos blancos y azules.

Llegamos cansados pero felices de poder tener el privilegio de disfrutar cada día con lo que más nos gusta: viajar y conocer sitio nuevos y maravillosos. Y mañana más…

Murallas fernandinas

Murallas fernandinas es el nombre por la cual se conoce el cinturón medieval de murallas de Oporto, del cual solamente pequeñas partes han sobrevivido hasta nuestros días. Con un perímetro de cerca de 2,6 km, su trazado seguía por la margen ribereña del Duero hasta la salida del actual puente Luís I. En la imagen de arriba, vemos la estatua de Arnaldo Gama (fue un periodista y escritor portugués, autor de novelas románticas de carácter histórico) junto a las murallas fernandinas.

Desde esta parte de la muralla fernandina se obtiene una bonita vista del puente Luis I. Aunque antes de atravesar este puente, visitamos la catedral.

Catedral de Oporto

La Catedral de Oporto está situada en el corazón del centro histórico de la ciudad, en el barrio de Batalha, junto a las murallas que tiempo atrás protegieron la ciudad. Es el edificio religioso más importante de Oporto. El inicio de su construcción data de la primera mitad del siglo XII, y se prolongó hasta principios del siglo XIII.

A lo largo de su historia, la Catedral de Oporto ha sufrido muchas reconstrucciones, por lo que presenta diferentes estilos. La mayor parte es barroca, aunque la estructura de la fachada y el cuerpo de la iglesia son románicos, y el claustro y la Capilla de San Juan Evangelista son de estilo gótico.

Me llamó la atención que en el centro de la plaza de la Catedral hay una columna (imagen de arriba) llamada Pelourinho, que imita a las que se utilizaban para colgar a los criminales pero que nunca se uso para ello. Es de 1940 y está compuesto de una gran columna salomónica rodeada por una barandilla sobre un pedestal con escaleras.

La catedral y su claustro son dos de las visitas imprescindibles en Oporto; la catedral está merecidamente declarada Monumento Nacional. Al ir el día de Año Nuevo no estaba abierta.

Vistas de la ciudad desde la plaza de la Catedral

Desde este lugar se obtiene una bonita vista de la ciudad destacando la Torre de los Clérigos con sus 76 metros de altura.

Teatro Nacional São João

El Teatro Nacional São João se encuentra ubicado en la plaza Batalha, en el centro histórico de la ciudad. La historia del teatro comienza en 1794, cuando la autoridad principal de Oporto, encargó al arquitecto italiano Vicente Mazzoneschi el proyecto de un teatro de ópera. El teatro original se construyó entre 1796 y 1798 y fue nombrado São João (San Juan) en honor del príncipe regente João, más tarde coronado rey como Juan VI de Portugal.

Puente de Luis I

El puente de Luis I es un puente sobre el río Duero que une Oporto con Vila Nova de Gaia. Fue inaugurado en 1886 y es uno de los lugares emblemáticos de la ciudad. Lo más característico del puente es su gran arco de hierro, para cuya construcción fueron necesarias miles de toneladas de este material. Además, el puente cuenta con dos pisos: por el superior, de casi 400 metros de longitud, circula el metro de Oporto y por el inferior, de unos 175 metros, los vehículos. En ambos niveles hay habilitados carriles específicos para peatones, por lo que se puede pasear por el puente e ir parando a mirar o hacer fotos donde nos apetezca. Nosotros lo cruzamos por arriba para ir Vila Nova de Gaia y luego por abajo para ir a la Ribeira.

Cruzando el puente de Luis I por la parte superior

La construcción del puente se basa en el proyecto de un ingeniero belga discípulo de Eiffel, lo que explica la semejanza con la estructura metálica de la Torre Eiffel.

Desde el puente se obtienen unas bonitas vistas del colorido barrio de la Ribeira, aunque como veremos luego son apreciadas mejor desde Vila Nova de Gaia (en la orilla opuesta).

El puente de Don Luis I y sus alrededores conforman uno de los lugares más bellos y románticos de Oporto, basta con darse un paseo al atardecer por la pasarela superior del puente para poder comprobar la belleza de las vistas que nos ofrece.

Mi conexión con los animales siempre ha sido asombrosa. Al pasar por el puente esta simpática gaviota me dejó acercarme hasta tocarla, proporcionándome este buenísimo primer plano.

Jardín de la Colina

Nada más cruzar por la parte superior el puente Don Luis I, ya en la zona de Vila Nova de Gaia, nos encontramos con el jardín de la Colina. El jardín cuenta con un lago, un quiosco y una amplia variedad de preciosas plantas.

El jardín estaba adornado con lo típico en esas fechas navideñas.

El jardín también cuenta con un mirador magnífico hacia el Duero, la Ribeira y el centro histórico de Oporto.

Bajando a la orilla de Vila Nova de Gaia

Para bajar a la orilla de Vila Nova de Gaia se puede coger el teleférico en el lugar de la imagen de arriba, que te dejará en la orilla del Duero, junto a las famosas bodegas o bajar a pie las cuestas.

Bajando la cuesta me encontré con este precioso gato persa. Tan cariñoso y dulce ¡ummmm!. Se dejó acariciar, achuchar y abrazar como si me conociera de toda la vida ??.

Orilla de Vila Nova de Gaia

En Vila Nova da Gaia podréis dar un paseo por la orilla del río, en barco por el Duero o visitar algunas de las afamadas bodegas donde se fabrica el vino con denominación de origen de Oporto. Una de las estampas más típicas de este paseo son los llamados «rabelos«, unos barquitos de madera que se construyeron originariamente para el transporte de los toneles de vino y hoy en día se utilizan como reclamo turístico para hacer pequeños cruceros por el Duero.

Desde Vila Nova de Gaia, en la orilla opuesta pude apreciar mejor las coloridas y decoradas fachadas del barrio de la Ribeira, que en un principio llamaron mi atención. Después de dar un paseo por esta orilla, cruzamos de nuevo el puente de Luis I, esta vez por debajo para llegar al bonito barrio de la Ribeira.

Barrio de la Ribeira

El barrio de Ribeira es uno de los lugares más importantes a la hora de conocer Oporto. Como su nombre indica, es la zona situada en la ribera del río. Sus coloridas y decoradas fachadas atraen la atención de todos los visitantes. Si buscáis un lugar con encanto en el que comer y pasear, el barrio de Ribeira es el lugar adecuado. Encontraréis decenas de restaurantes con terrazas en las que podréis degustar platos típicos portugueses mientras disfrutáis de las vistas del puente de Luis I y de Vila Nova da Gaia con sus bodegas. En este lugar almorzamos y descansamos un rato disfrutando de sus hermosas vistas.

Subida al mirador de la Victoria

Ya por la tarde, empezamos subiendo desde la Ribeira al mirador de la Victoria. De camino nos encontramos al igual que cuando fuimos a Lisboa, con los llamados Tuk Tuk. Si no te apetece o no puedes andar tanto tiempo está opción es ideal. Puedes alquilar estas graciosas motonetas con o sin guía para recorrer los lugares más emblemáticos de esta bella ciudad?.

Palacio de la Bolsa

Antes llegar al mirador de la Victoria, nos encontramos con el Palacio de la Bolsa. Sede de la asociación comercial de Oporto, es uno de los edificios más grandes y bonitos de la ciudad. Este impresionante y enorme edificio de piedra de estilo neoclásico esconde estancias finamente decoradas.

Mirador de la Victoria

El mirador de la Victoria está un poco escondido pero mereció la pena llegar. Un buen lugar que ofrece una panorámica espectacular de la bonita ciudad de Oporto.

De camino a la Torre de los Clérigos

Después del mirador de la Victoria, nuestra próxima parada era la Torre de los Clérigos. Antes de llegar nos llamó las letras gigante con el nombre de la ciudad.

Cabinas

Debido a la buena relación que tiene Portugal con los ingleses, podemos encontrar hasta una treintena de cabinas rojas. Estas han sido regaladas por los británicos y podemos encontrarlas en cualquier rincón. Muchas están grafiteadas o cambiadas del color rojo característico, reconvertidas en piezas de arte.

 Me encantaron pues dan un toque de color a la ciudad.

Casa Oriental

Situada cerca de la Torre de los Clérigos, la casa Oriental es una de las tiendas más antiguas de Oporto, en ella podemos encontrar productos autóctonos.

De esta pintoresca y preciosa tienda nos impactó la decoración. El interior es muy bonito, parece una máquina del tiempo. Nos quedamos maravillados.

Torre de los Clérigos

La Torre de los Clérigos es la más alta de Portugal y uno de los principales símbolos de la ciudad. Sus 76 metros de altura y los más de 200 escalones dan acceso a una privilegiada vista panorámica de Oporto. En la subida a la torre os encontraréis con 49 campanas que os darán un buen susto si suenan a vuestro paso.

Iglesia de los Clérigos

La Iglesia de los Clérigos es un edificio barroco, formando con su famosa Torre de los Clérigos un conjunto arquitectónico muy conocido en la ciudad de Oporto. Fue construido por la hermandad de los Clérigos Pobres en el casco antiguo de la ciudad, en el lugar que se conoce como «el cerro de los ahorcados«, ya que es el lugar donde se enterraba a los ajusticiados.

Avenida de los Aliados

La avenida de los Aliados es el corazón de Oporto. Es una avenida muy ancha, con un paseo central muy amplio y peatonal, y a ambos lados se suceden multitud de edificios del siglo XIX, muchos de ellos ocupados por hoteles y pensiones. Una de las esculturas más relevantes de este paseo es la estatua ecuestre de Pedro IV. La estatua está colocada sobre un pedestal de piedra, y mide diez metros de altura; representa al emperador montado a caballo y sujetando en la mano derecha la «Carta Constitucional«.

Ayuntamiento de Oporto

El Ayuntamiento de Oporto se encuentra al final de la avenida de los Aliados.​ El inmueble consta de seis plantas, un sótano y dos patios interiores. Exactamente en el centro del ayuntamiento, se eleva una torre de 70 m de altura. En su interior se encuentra un carillón, a la que se puede acceder por una escalera de 180 peldaños. La fachada es de piedra de granito de las canteras y está adornada con una docena de esculturas.

Iglesia de la Trinidad

La Iglesia de la Trinidad se encuentra detrás del ayuntamiento. Es una es una de las iglesias más imponentes de Oporto. De estilo neoclásico con influencias barrocas, la portada de esta bonita iglesia se encuentra precedida de un pórtico con tres arcos, sobre el que se levanta la torre, con campanas y reloj.

Capilla de las Almas

La Capilla de las Almas se encuentra al lado del mercado do Bolhao. Se trata de una de las iglesias más especiales de Oporto, inconfundible por su llamativa fachada formadas por casi 16.000 azulejos blancos y azules donde podemos contemplar escenas religiosas de la vida de Santa Catalina y San Francisco de Asís.

Ya cansados pero contentos de llevar todo el día recorriendo esta bonita ciudad, dimos por concluida la visita a Oporto.

A continuación os dejamos el enlace para continuar con nuestro tercer día en esta maravillosa ciudad.

Oporto II

  • Café Majestic.
  • Iglesia de San Ildefonso.
  • Plaza de la Batalla de Oporto.
  • Estación de San Bento.
  • Iglesia de San Antonio dos Congregados.
  • Librería Lello y la iglesia de las Carmelitas.
  • Palacio de Cristal.
  • Piscina das Marés en Leça Da Palmeira.

Navidades en Oporto, Braga, Guimarães y Aveiro