La isla de Nuestra Señora de las Rocas (Gospa od Škrpjela) es una pequeña isla artificial de 3030 m² situada en la bahía de Kotor (Montenegro), frente al pueblo de Perast. Esta inusual isla fue creada como resultado de la leyenda y la tradición, con la solemne ayuda de los habitantes de Perast y otras lugares de la bahía. A continuación nuestra visita.

La isla artificial fue formada a partir de rocas y restos de viejos barcos hundidos transportados por la gente. Además, a manera de tradición, cada 22 de julio se pueden ver barcos ataviados que desfilan hacia la isla para lanzar rocas y así conservar la isla artificial a lo largo del tiempo, en una festividad anual conocido como la Fasinada, que se acompaña de música y canto.

En la isla destaca como construcción la iglesia de Nuestra Señora de las Rocas. Construida en 1632 para sustituir a la anterior de 1452, la iglesia ha sido reformada y ampliada en 1722 y en 1979. Forma parte (junto con toda la bahía de Kotor) del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. Es una iglesia de una sola nave, de estilo bizantino. La cúpula muy característica por su color azul que destaca su alma marinera, se alza a 11 metros de altura, así como un campanario construidos a mediados del siglo XVIII, lo que aporto un toque barroco al recinto.

Según la leyenda, en 1452 dos marineros venecianos encontraron una imagen de la Virgen reposando en una roca de la bahía, tiraron piedras alrededor del icono y poco a poco se fue creando un islote donde construyeron una pequeña capilla. La tradición de tirar piedras sigue viva como dijimos anteriormente y forma parte de una de las regatas de vela más antiguas de Europa, la Fasinada.

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Islote de San Jorge

Al lado de esta isla podemos ver el islote de San Jorge, que a diferencia de la isla de Nuestra Señora de las Rocas, es una isla natural que contiene un monasterio benedictino, del siglo XII, dedicado a San Jorge.

En la imagen de arriba, además de la isla de San Jorge, a la izquierda podemos apreciar en la falda de la montaña el bonito pueblecito de Perast que también visitamos.

Admirando estos bellos paisajes dimos por acaba la visita a la isla de Nuestra Señora de las Rocas.

En la imagen de arriba, vemos las islas de Nuestra Señora de las Rocas y el islote de San Jorge desde nuestro crucero. Los paisajes de Montenegro que discurren entre sus fiordos resguardan verdaderas joyas. La bahía de Kotor nos encantó porque no puedes dejar de mirar e intentar comprender lo bella y caprichosa que es la madre naturaleza. Nos encontramos ante el fiordo más meridional de toda Europa que surge encajonado entre las altas montañas de los Alpes Dináricos. Hay zonas donde la bahía es realmente estrecha y parece mentira que cada día este tramo lo recorran cruceros de increíbles dimensiones. Una maravilla para todos los sentidos.

Perast: Una perla a orillas del Adriático

Kotor: La joya de los Balcanes

Montenegro: Bello país del sureste de Europa en la península balcánica