Después de ver La Isleta del Moro, subimos en coche unos 5 minutos hasta el mirador de la Amatista. La carretera transcurre paralela a la costa, regalándote unas vistas increíbles durante todo el trayecto. A pie de la carretera AL-4200 entre las poblaciones de La Isleta del Moro y Rodalquilar, encontramos este espléndido mirador, construido en el lugar de un antiguo puesto de vigilancia de la Guardia Civil.
Después de dejar el coche en una pequeña explanada para vehículos donde puedes encontrar una pequeña tiendecita de souvenirs y un punto de información turístico, se accede al mirador por un camino de tierra estrecho no apto para gente con vértigo.
Desde él podemos contemplar los espectaculares acantilados de parte de la sierra de Cabo de Gata, adentrándose en el mar, a vista de pájaro. Y contemplar como el mar se funde con un cielo más azul de lo que estamos acostumbrados. Se pueden observar varias pequeñas calas para el baño, y en la lejanía destaca el Cerro de los Frailes, la montaña más alta del parque, con casi 500 metros de altura, que curiosamente es el resto de un antiguo volcán.
Es un lugar maravilloso para disfrutar de las increíbles vistas de la inmensidad del océano.
Sin duda uno de los lugares más bellos del Cabo de Gata. El bonito encuentro de dos elementos: las montañas volcánicas negras y los deslumbrantes colores del mar infinito.
Desde este bonito balcón con vistas al mar Mediterráneo, nos quedamos un buen rato observando la belleza del lugar.
Respecto al nombre “mirador de las Amatista”, no se sabe a ciencia cierta su origen. Es cierto, que en las antiguas minas del Cabo de Gata se han extraído amatistas, una piedra preciosa de color morado. Me gusta pensar, que este nombre viene de los tonos turquesas-morados de sus aguas cristalinas, que en los días sin viento, nos permiten ver hasta los fondos marinos del Cabo de Gata.
La flora y fauna de la zona está representada en un pequeño “cuadro” hecho de azulejos.
En este árido paisaje subdesértico, de escasa lluvia, el palmital del primer plano contrasta con el oscuro sustrato volcánico. Gracias a la humedad del mar y las nieblas marinas, se mantiene junto con otras plantas como cornicabras, acebuches y lentiscos.
Nos encanta este mirador en medio de un paisaje hermoso. Me quedo con la sensación de inmensidad y de tranquilidad que me dejó este sitio. Una auténtica joya como su nombre indica.
Los Escullos
Otras de las impresionantes playas del Cabo de Gata es la playa de los Escullos o playa del Arco. Está situada en pleno Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar, entre las localidades de San José y la Isleta del Moro. En la zona de Los Escullos existen varias zonas de baño, a la entrada de la barriada, junto al hotel y el camping está la playa del Arco, esta playa es bastante grande, 350 metros de longitud por 40 de anchura, de arena fina y dorada, a su derecha termina en la duna fósil de los Escullos. Para conservar dicha duna se ha prohibido subirse a ella con un cartel que lo explica y así no cometer el error que cometimos nosotros por desconocimiento ya que no habíamos escuchado nada y no había ningún cartel hace unos cuantos años cuando fuimos.
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