Aveiro es una pequeña ciudad portuguesa situada al sur de Oporto, a unos 75 km. Se le conoce como la «Venecia de Portugal» por los canales que atraviesan el centro de la ciudad, lo cual dota a la ciudad de una gran belleza, pudiendo recorrerlos por unas embarcaciones de tipo góndola, llamadas “moliceiros«. A nosotros particularmente nos encantó este lugar.

Cerca de Aveiro se encuentran las gloriosas playas de Costa Nova y las coloridas casas a rayas.

En nuestro último día en Oporto el plan era ver Aveiro ya que es un lugar fácil de recorrer y se puede visitar en pocas horas y además porque nos venía bien de camino a Sevilla ya que está al sur de Oporto. Así que, después de desayunar, cogimos la carretera y en una hora llegamos a Aveiro. A continuación nuestra visita a este encantador lugar.

Ría de Aveiro

La ría de Aveiro con sus tres canales que dividen la ciudad en dos partes, son la principal atracción de esta pequeña ciudad. En Aveiro todo vive alrededor de estos 47 kilómetros de agua dispuesta en paralelo al mar. El agua refleja el color de los barcos moliceiros y las casas modernistas, lo que vuelve único y seductor el encanto de este lugar. La ría se formó a partir del siglo XVI, cuando la línea del mar retrocedió, dejando a lo largo de 11.000 hectáreas cordones litorales que formaron una laguna. Hoy es una auténtica red de canales e islas y sus aguas son refugio de numerosas especies. Una riqueza tan excepcional que ha llevado a la ría a ser considerada área protegida. La producción de la sal común emplea técnicas milenarias y es una de las más características de Aveiro.

Barrio viejo de Beira Mar y canales de Aveiro

También es muy conocido el barrio viejo de Beira Mar donde se conservan las tradicionales casas y los almacenes de sal de la ría. Aveiro conserva perfectamente su espíritu de ciudad pesquera tradicional, mezclado con toques de modernidad visibles en su arquitectura y en su población mayoritariamente joven, estudiantes de su famosa universidad.

Antes de navegar por los canales de Aveiro, dimos un relajado paseo viendo las bonitas embarcaciones llamadas moliceiros, que tienen un colorido fantástico decorados con escenas de tipo romántico, religiosas, satíricas, y sobre todo populares y divertidas.

Puente de Carcavelos

En el canal de San Roque se encuentra el puente de Carcavelos. En sus tiempos fue muy importante para los que trabajaban en las minas de sal, ya que era aquí por donde cruzaban la ría para ir a su lugar de trabajo. A mediados del siglo XX, el puente fue sustituido por el actual que imita los antiguos puentes venecianos. Está decorado en azulejería portuguesa con el escudo de la ciudad.

Canal principal

Después de dar una vuelta por los otros canales de Aveiro, llegamos al canal principal donde se ubicaban varios stand de venta de tickets para navegar por los canales en los llamados moliceiros, que salen y llegan en ese lugar.

Excursión por los canales de Aveiro

Los barcos moliceiros se utilizaban tradicionalmente para recoger algas marinas. Actualmente se emplean para pasear y hacer recorridos por sus canales a los turistas. Son barcos a motor, por lo que no debemos esperar que nos lleven como en las góndolas venecianas, pero siguen teniendo su encanto.

En la imagen de arriba, vemos la antigua fábrica de cerámica. Es un hermoso edificio de arquitectura industrial en ladrillo rojo, de principios del siglo XX. En su época tuvo una gran importancia económica para la ciudad, pero debido a la crisis económica tuvo que cerrar. Una vez cerrada esta fábrica, se convirtió en 1995 el Centro Cultural y de Congresos.

Lo cierto es que Aveiro tiene mucho encanto. Los barcos moliceiros de colores navegan con calma por sus canales.

Tanto el capitán de esta pequeña embarcación como nuestro guía se mostraron muy simpáticos, agradables y se les veía muy felices. Lo pasamos genial…

¿Qué famosa ciudad atravesada por canales les encanta visitar a los enamorados? Lo primero que se te vendrá a la cabeza será seguramente: Venecia o Ámsterdam. Improbable que pienses en Aveiro. ¿Aveiro? Sí, este pequeño municipio que ha sido frecuentemente denominado “La Venecia de Portugal” por sus canales que atraviesan el centro de la ciudad.
Hemos tenido la suerte de haber estado en Venecia y podemos decir que no hay tantos canales ni son tan bellos, pero para compensar diremos que Aveiro conserva perfectamente su espíritu de ciudad pesquera tradicional, mezclado con toques de modernidad visibles en su arquitectura. Además, si en Venecia tienen las góndolas (por cierto, un paseo es carísimo) en Aveiro están los moliceiros, donde puedes estar 45 minutos surcando los canales con capitán y guía por un módico precio.

Después de 45 minutos que se nos pasaron volando, llegamos al final de la excursión.

Museo de Arte Nova

Después del recorrido en barco, disfrutamos de un agradable paseo por la ciudad. Lo primero que vimos fue la bonita fachada del museo de Arte Nova (imagen de arriba). La Casa do Major Pessoa, llamada así en honor al individuo que ordenó su construcción y conocida actualmente por ubicar en su interior el museo de Arte Nova, es uno de los edificios más representativos en Aveiro.

Paseando cerca de los canales, que nos llevan por la ciudad como si fueran caminos de agua plateada, vamos descubriendo en cada detalle las casas modernistas que decoran los márgenes de la ría.

Monumento Joao Afonso

El monumento dedicado a Joao Afonso, en bronce sobre un pedestal de piedra caliza, representa a uno de los hombres que más han contribuido en los descubrimientos y en la historia de Portugal. Participó en la expedición a las Minas (1481) y en el descubrimiento del río Zaire y del Congo.

Antigua Capitanía del Puerto de Aveiro

El bonito edificio de la Antigua Capitanía del Puerto de Aveiro también conocido como Casa dos Arcos, tiene arcos en su asentamiento por los cuales transcurre la ría. Originalmente servía como molino. Hoy en día es un edificio público, que alberga la asamblea municipal. Es un edificio muy bonito, considerado uno de los ejemplos más significativos de Art Nouveau en la región.

Plaza de la República

La plaza de la República es una de las plazas principales de la ciudad. En ella podemos encontrar teatro Aveirense; el monumento a José Esteváo Coelho de Magallanes; el ayuntamiento, edificio barroco del último cuarto del siglo XVIII con una torre campanario y la Iglesia de la Misericordia.

Otro ejemplo de la belleza de la decadencia de Portugal se encuentra en estos bancos de Aveiro. Cuando un pueblo es humilde es capaz de sacar partido a lo que sea. Ahí entra en juego la cultura que se reinventa cada día, a modo de movimientos artísticos o de conciencia social que intenta aprovechar el espacio urbano y embellecerlo a través de cualquier manera imaginable. La propia ciudad inspira y es una gran fuente de creación para el artista callejero.

Catedral de Aveiro

La Catedral o sé de Aveiro, también conocida como Iglesia de Santo Domingo, se encuentra localizada en pleno centro histórico. Esta importante edificación religiosa fue fundada en 1423 por el Infante D. Pedro. Sus orígenes se remontan al siglo XV, aunque de esta época solo se conserva una pared, que tiene incrustada una Virgen gótica. Fue reconstruida en el siglo XVIII en estilo barroco, aunque en ella pueden encontrarse diferentes estilos arquitectónicos. La iglesia llama la atención inmediatamente por su magnífica fachada, enmarcada por 4 columnas salomónicas con imágenes de las Virtudes Humanas, y la imponente torre del campanario.

En su interior se encuentra el famoso Cruzeiro de S. Domingos de estilo gótico, que data del finales del siglo XV.

Bonito pasillo de columnas situado a la derecha de la Iglesia de Santo Domingo.

Puente de Lazos de Amistad

De vuelta al coche para irnos a Costa Nova vimos el puente de los Lazos de Amistad (aunque nuestro guía nos contó que se le llama el puente de los amores o de los cariños). Se trata de uno de los puentes que cruzan el canal de Aveiro para llegar al centro y está lleno de lazos con frases de amor. Como si fuera el puente de los candados de París o el Puente Viejo de Florencia, pero en vez de candados, lazos, que queda más bonito y no daña la estructura del puente. Un símbolo del Amor que hace más bonita y rica la ciudad de Aveiro.

Aquí vemos los bonitos lazos de colores que embellecen este puente.

En este bello lugar paramos 10 minutos para descansar y observar los pintoresco moliceiros pasar.

De vuelta al canal principal de Aveiro para recoger el coche

El coche lo teníamos aparcado al lado del canal principal por lo que volvimos a este lugar de nuevo y disfrutamos de unas últimas fotos para el recuerdo.

Paramos a comer y nos dirigimos a la playa de la Barra y a Costa Nova, situado a unos 10 km. de Aveiro.

Playa de la Barra

Tanto la playa de la Barra como la playa de Costa Nova son consideradas tradicionalmente como las playas de Aveiro por su cercanía, aunque administrativamente pertenecen a la ciudad de Ílhavo. Son prácticamente vírgenes y cuentan con una arena blanca, fina y limpia. De la playa de la Barra destaca un gran faro rojiblanco que se ha convertido en su símbolo. Se trata del faro de la Barra, siendo el más alto de Portugal y el segundo de la Península Ibérica, sólo un metro por debajo del faro de Chipiona (Cadiz, España) El faro tiene la particularidad de emitir dos luces.

Costa Nova

Parte del colorido y de la belleza de Aveiro es inseparable de los famosos palheiros de Costa Nova. Estas construcciones típicas, originalmente utilizadas por los pescadores de la zona para guardar los materiales de pesca, se han ido utilizado a lo largo de los años como casas de veraneo. Destacan por sus fachadas pintadas a rayas de colores llamativos.

Aunque por supuesto las casas de colores son muy bonitas, no es solo un lugar que visitar para ver unas fachadas pintadas de colores. Costa Nova es uno de esos pequeños lugares que a pesar de no tener un gran tamaño te enganchan, en pocos metros combina varios lugares que como poco te harán pasar un día inolvidable.

Estas casitas que se ven en la imagen de arriba (palheiros) caracterizadas por fachadas de madera, con listas en colores vivos y alegres, alternadas con blanco, pertenecían a pescadores que tras largas temporadas fuera de casa las pintaban así para reconocerlas a su vuelta. Hoy día algunas de ellas albergan restaurantes.

Paseo por la ría de Aveiro en Costa Nova

Esta bonita población cuenta con varios atractivos, uno de ellos son estas casas de rayas de colores mirando a la ría de Aveiro que le dan un toque diferente al pueblo. Al atravesar la estrecha lengua de tierra desde la ría se llega al océano, bravo y con oleaje. La extensión de la playa es enorme y permite dar buenos paseos.

Y otra cosa más que se puede hacer en Costa Nova es caminar junto a la ría de Aveiro. Un extenso paseo que recorre todo Costa Nova donde podremos admirar la ría a un lado y las casas de colores a otro.

Después de un rato andando y disfrutando de este bello paseo llegamos al puerto de Aveiro.

Playa de Costa Nova

La playa de Costa Nova es de esas pocas playas casi vírgenes que aún no han sido rodeadas de apartamentos y hoteles. Muchos viajeros se desplazan hacia ella y hacia otras playas cercanas para practicar deportes acuáticos como la vela, el windsurf o el kitesurf ya que el viento que suele haber normalmente en la zona es ideal. Eso sí, si lo que buscas es un baño en la playa y eres algo friolero piénsatelo dos veces.

Esta bellísima playa de Costa Nova esta caracterizada porque su arena es tan blanca que parece nieve. Aquí dimos un paseo relajante admirando el encanto del lugar.

Comos hemos ido en enero nos hemos salvado de la saturación del verano. Un viaje estupendo y que no está muy lejos de España. La playa en concreto es un lugar precioso para pasar una mañana al sol, en plan relajado y tranquilo.

Viendo esta bonita puesta de sol dimos por concluida la visita. Ahora toca 6 horas de coche hasta Sevilla.

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